Sombras Nada Mas (A Duo Con Javier Solis) - Rocío Dúrcal

Quisiera abrir lentamente mis venas Mi sangre toda verterla a tus pies Para poderte demostrar Que más no puedo amar Y, entonces, morir después Y, sin embargo, tus ojos azules Azul que tienen el cielo y el mar Viven cerrados para mí Sin ver que estoy aquí Perdido en mi soledad Sombras nada más Acariciando mis manos Sombras nada más En el temblor de mi voz Pude ser feliz Y estoy en vida muriendo Y entre lágrimas viviendo El pasaje más horrendo De este drama sin final Sombras nada más Entre tu vida y mi vida Sombras nada más Entre tu amor y mi amor Qué breve fue tu presencia en mi hastío Qué tibias fueron tus manos, tu voz Como luciérnaga llegó tu luz Y disipó las sombras de mi rincón Y yo quedé como un duende temblando Sin el azul de tus ojos de mar Que se han cerrado para mí Sin ver que estoy aquí Perdido en mi soledad Sombras nada más Acariciando mis manos Sombras nada más En el temblor de mi voz Pude ser feliz Y estoy en vida muriendo Y entre lágrimas viviendo El pasaje más horrendo De este drama sin final Sombras nada más Entre tu vida y mi vida Sombras nada más Entre tu amor y mi amor

Quisimos esquivar el fuego del anillo No puedes evitar que el cuerpo te pida un poco más Una vez soñé con vos y en un instante puro Los vi muriendo de a poco, de a poco, un poco loco Ay Yo sé Que esto no es locura Es solo un capricho, nada más Quisiste separar el dedo del gatillo No puedes evitar que el cuerpo te pida un poco más En esta situación de tanta soledad Saldré a buscarte una vez más Ay Yo sé Que esto no es locura Es solo un capricho, nada más Ay Yo sé Que esto no es locura Es solo un capricho, nada más Ay Yo sé Que esto no es locura Es solo un capricho, nada más Ay Yo sé Que esto no es locura Es solo un capricho, nada más.

El problema es plasmar el tema De manera tal que pueda espantar a los pajaros que vuelan Vuelan sobre mi cabeza, buitres que de mí esperan El cadáver para poder burlarse mientras comen Comen de un cuerpo envenenado por la duda Es que la duda te petrifica, te quita las ganas Cuando la lengua se dispara; se dispara, y clama por ti Rap de mi vida, muéstrame una salida Eres parte de nuestro hábitat El hijo del cemento tiene su cualidad La calidad, óyelo La casualidad es demasiado fácil, entiéndelo Mi rol nunca fue entretenerte Es otro corte, así de simple Pero, ¿qué nos pasa cuando se acaba la fe? Ve a la raíz del problema para darte cuenta que De tal muerto, tal enfermo fue (fue) Así nomás, desde el comienzo, en círculo vicioso El porqué, el para qué, qué El porqué, el para qué, qué El porqué, el para qué, qué (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata La primera idea es la que no tiene que morir Es la escusa más importante que tengo para construir Mi refugio del verso es porque sí Sí, con tanta pregunta enloquecí Cuéntalo, con toda la influencia manifiesta Cómo se siente electrocutado en los 15 días felices En adelante te sigo, cautivo del ritmo Mi grito es el relato de la vida Nada más, nada menos Nada más, nada menos Todos Todos Todos los animales contra el muro Contra el muro Saltar la barrera, emprender el son seguro de nuevo Ambos polos, típico Destruir el reloj utópico Bienvenido a mi mundo fantástico, irónico Perfil bajo, yo soy del subjetivo Cuando la vida va cuesta arriba nos golpea, nos obliga A jugar nuestra última carta, pero ¿a quién le importa? Hay una clase resentida, nunca sabrás de qué se trata El porqué, el para qué de esto El porqué, el para qué, qué El porqué, el para qué, qué El porqué, el para qué, qué (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata (Hey, hey) ven a nuestro baile (Hey, hey) esta música nos mata ¿Qué cosas más hacías? (¿Mmh?) Con ellos, ¿qué, qué hacías? Los matabas con piedras, con, con cuchillos Pero, después ya no hacía' nada más con ellos A uno le cortaste la cabeza, ¿qué más cosas hacía'? Los cortaba, y a otro le saqué el corazón ¿Le sacaste el corazón? Sí, sí, sí

Quisiera abrir lentamente mis venas Mi sangre toda verterla a tus pies Para poderte demostrar que más No puedo amar y entonces Morir después Y sin embargo, tus ojos azules Azul que tienen el cielo y el mar Viven cerrados para mí Sin ver que estoy aquí Perdido en mi soledad Sombras nada más Acariciando mis manos Sombras nada más En el temblor de mi voz Pude ser feliz Y estoy en vida muriendo Y entre lágrimas viviendo El pasaje más horrendo De este drama sin final Sombras nada más Entre tu vida y mi vida Sombras nada más Entre tu amor y mi amor Qué breve fue tu presencia en mi hastío Qué tibias fueron tus manos, tu voz Como luciérnaga llegó tu luz Y disipó las sombras de mi rincón Y yo quedé como un duende temblando Sin el azul de tus ojos de mar Que se han cerrado para mí Sin ver que estoy aquí, perdido En mi soledad Sombras nada más Acariciando mis manos Sombras nada más En el temblor de mi voz Pude ser feliz Y estoy en vida muriendo Y entre lágrimas viviendo El pasaje más horrendo De este drama sin final Sombras nada más Entre tu vida y mi vida Sombras nada más Entre tu amor y mi amor

Quisiera abrir lentamente mis venas... Mi sangre toda vertirla a tus pies... Para poderte demostrar Que más no puedo amar. Y entonces... Morir después. Y sin embargo tus ojos azules, ¡Azul que tienen el cielo y el mar! Viven cerrados para mí. Sin ver que estoy así... ¡Perdido en mi soledad! ¡Sombras, nada más, Acariciando mis manos! ¡Sombras, nada más, En el temblor de mi voz! Pude ser feliz Y estoy en vida muriendo. Y entre lágrimas viviendo Los pasajes más horrendos De este drama sin final... ¡Sombras, nada más! Entre tu vida y mi vida... Sombras, nada más, Entre mi amor y tu amor! Qué breve fue tu presencia en mi hastío. Qué tibias fueron tu mano y tu voz Como luciérnaga llegó Tu luz y disipó Las sombras de mi rincón... Y me quedé como un duende, temblando Sin el azul de tus ojos de mar, Que se han cerrado para mí Sin ver que estoy así...

He llegado hasta tu casa, Yo no se como he podido, Si me han dicho que no estas, Que ya nunca volver